Rafael Gual Cosío, director de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (Canifarma), informó que los más afectados con la compra de medicamentos en el extranjero, mismos que sean importados sin un registro sanitario emitido por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
A través de una entrevista con EL UNIVERSAL, Gual Cosío destacó que el decreto sobre la importación de medicamentos, establece que se podrán adquirir medicinas que no tengan registro nacional, si éstas tienen la aprobación de los órganos reguladores de Estados Unidos (FDA), de la Unión Europea (EMA), de Canadá y de Australia, así como de agencias reguladoras de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por su parte, comentó que la OMS aclaró, a través de su página web, que los medicamentos que se encuentren en la lista de productos precalificados, no garantizan seguridad ni eficacia.
“En el Descargo de responsabilidad de la lista de medicamentos precalificados de la OMS, que se encuentra en su página oficial, la organización aclara que ante cualquier adversidad o situación que no sea ideal, ellos no se hacen responsables. La OMS se exime de toda responsabilidad por cualquier lesión, muerte, pérdida, daño u otro tipo de perjuicio que surja como resultado de la adquisición, distribución y uso de cualquier producto contenido en este listado”, expresó.
Agregó que el uso de estos medicamentos podría afectar a la salud de los pacientes, si estos no cuentan con los requisitos que impone la reguladora nacional.
“Que estén precalificados por la OMS no es un aval de eficacia. Si a un paciente le sustituyen sus fármacos por los importados, puede haber un daño a la salud. Estamos hablando de que puede entrar cualquier cosa, y eso, en lugar de ayudar, pone en riesgo la vida de los pacientes. La Cofepris debe prevenir estas eventualidades”, explicó.
Por otro lado, comentó que a parte de los posibles daños a la salud, la importación de medicinas de cualquier parte del mundo omite la industria instalada en México, misma que por años se ha preocupado por cumplir con los requisitos de la Cofepris.
“Vemos un trato inequitativo, porque a la industria farmacéutica que está aquí es a la que se le exigen condiciones muy rigurosas para garantizar la calidad de los medicamentos. El marco regulatorio que se ha constituido para garantizar calidad nos ha dado prestigio nacional e internacional. Es una situación que también está en riesgo, no sólo para los pacientes y para la industria, sino que influirá en la precalificación que tenía Cofepris como un agente regulador de referencia: traer cualquier cantidad de productos con una calidad desconocida nos hará perder esa autoridad”, finalizó.