Después de casi cinco años, el pasado lunes 12 de enero se inauguró la Línea 2 del Mexibús que correrá de Las Américas, en Ecatepec, hasta La Quebrada, en Cuautitlán Izcalli, aunque todavía tardará algunos días para entrar en funcionamiento.
La obra inaugurada por el presidente, Enrique Peña Nieto, y el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, fue prometida para antes de que concluyera el sexenio del entonces gobernador mexiquense Peña Nieto, pero por problemas financieros y del trazado de la ruta fue postergada su inauguración.
Debido a que la obra sigue inconclusa, los puentes peatonales que dan acceso a las estaciones están cerradas con tablas. Juan Sánchez Peláez, director de Transcomunicador Mexiquense, informó que las obras están a 90%, aunque aún falta la conexión con la estación Lechería del Tren Suburbano, donde se quedarán unidades para salir al día siguiente, además de semaforización y señalamientos para los retornos de automovilistas.
A pesar de que se dijo que habría pruebas de la operación del Mexibús, sobre la vía López Portillo no se observan unidades del transporte circulando. Además este lunes, unidades de transporte público circularon de manera normal por la avenida.
En relación a esto, Sánchez Peláez informó que el Mexibús será gratuito durante 45 días para compensar el retraso en su funcionamiento. Agregó que en estos momentos continúa la capacitación de choferes de los vehículos articulados y de que la salida de unidades de transporte público de la avenida López Portillo será gradual, lo que llevará aproximadamente seis meses.
La Línea 2 del Mexibús cuenta con 42 estaciones, 16 de las cuales se encuentran en Ecatepec, a lo largo de 5 kilómetros sobre la avenida Primero de Mayo, avenida Revolución (también conocida como 30-30) y la José López Portillo. Une los municipios de Ecatepec, Coacalco, Tultitlán y Cuautitlán Izcalli a lo largo de 22.5 kilómetros y su tarifa será de 6 pesos.
Al evento acudieron el gobernador mexiquense, el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan José Guerra Abud y el titular de CFE, Enrique Ochoa Reza, acompañados de empresarios de BMW, Walmart y Shneider.