La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de México ha presentado al Congreso de la Unión las Pre Criterios Generales de Política Económica para el año 2025, revelando un panorama económico que plantea tanto oportunidades como desafíos significativos para el país. Entre las proyecciones más notables se encuentra un crecimiento estimado del Producto Interno Bruto (PIB) de entre 2 y 3%, con una cifra puntual del 2.5%. Aunque esta tasa de crecimiento es positiva, marca una desaceleración en comparación con las expectativas para el año en curso.
La inflación, que ha superado las metas establecidas por el Banco de México (Banxico), se espera que desacelere a un 3.3% para el 2025. Sin embargo, esta cifra aún se sitúa por encima del objetivo del 3% del banco central, lo que sugiere retos importantes en el manejo de la política monetaria y la estabilidad de precios.
En el sector petrolero, se anticipa una caída significativa en el precio del barril de petróleo, de 71.3 a 58.4 dólares en promedio para el 2025. Esta reducción en los precios del petróleo implicaría menores ingresos petroleros, estimados en 98 mil millones de pesos menos, lo que representa un descenso del 13.5% en comparación con las estimaciones de este año.
Uno de los puntos críticos en las proyecciones de la SHCP es el ajuste anticipado en el gasto público, que se espera disminuya a 24% del PIB en el 2025, casi tres puntos porcentuales menos que el estimado para el cierre de este año. Este ajuste implicaría una reducción de 706 mil millones de pesos en el gasto neto total respecto a lo aprobado para este año, equivalente a un 7.5% menos.
Además, se ha ajustado al alza la estimación de los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) para este año, pasando de 5.4% a 5.9%. Para el 2025, se espera que el siguiente gobierno pueda reducir esta tasa a 3%. Este elevado déficit ha generado preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda del gobierno, con el Saldo Histórico de los RFSP manteniéndose en 50.2% del PIB para los próximos años.
Las proyecciones económicas para México en el 2025 delinean un escenario de desafíos en términos de crecimiento económico, inflación, ingresos petroleros y sostenibilidad fiscal. La SHCP asegura que estos ajustes no afectarán los compromisos de gasto social ni el cumplimiento de obligaciones legales o contractuales. Sin embargo, el panorama sugiere la necesidad de una gestión económica cuidadosa y proactiva para asegurar el crecimiento sostenible y la estabilidad financiera a largo plazo.