El Instituto Nacional Electoral (INE) de México ha aprobado un protocolo extraordinario para cubrir las vacantes de supervisores y capacitadores electorales. Esta decisión se produce en respuesta a las dificultades persistentes para llenar estos roles críticos, esenciales para la correcta ejecución del proceso electoral.
El protocolo incluye estrategias como la contratación de supervisores y capacitadores de listas de reserva y la asignación de personal del INE para suplir funciones críticas. Estas medidas buscan garantizar que todas las mesas directivas de casilla estén adecuadamente integradas para las elecciones del próximo 2 de junio.
La falta de personal adecuado podría comprometer la organización y la integridad de las elecciones, afectando potencialmente a miles de votantes. El INE ha identificado este problema principalmente en zonas específicas del país, donde las dificultades son más agudas.
Las vacantes han surgido por múltiples razones, incluyendo sueldos no competitivos y condiciones de inseguridad. Estos factores han disminuido el interés de la ciudadanía en participar como supervisores y capacitadores electorales.
Aunque el INE no considera que la situación actual constituya una crisis, planea analizar y abordar estas dificultades de manera exhaustiva después de los comicios para mejorar los procesos futuros.