México ha logrado situarse entre los países de la OCDE con la menor carga fiscal sobre los salarios en 2023, con un notable descenso del 0.98% en su tasa, situándose ahora en el 20%. Este cambio se atribuye a una disminución significativa en el impuesto sobre la renta (ISR).
Dentro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, México se coloca justo por encima de Chile, que tiene una tasa del 7.1%, y Colombia, que actualmente no impone carga fiscal sobre los salarios.
El reporte de la OCDE destaca también las reformas recientes en México, como la Ley de «vacaciones dignas» y ajustes en las deducciones personales que permiten una mayor retención de ingresos por parte de los trabajadores.
Además, se menciona una reforma significativa en la Ley de Seguridad Social que transicionó de un sistema de reparto a uno de cuentas individuales, con un enfoque en las aportaciones a la seguridad social gestionadas por entidades financieras privadas.
La OCDE también recuerda los ajustes realizados durante la pandemia de COVID-19, que incluyeron extensiones en los plazos para declaraciones fiscales y la suspensión temporal de inspecciones fiscales.