Diez alcaldes del área metropolitana de Monterrey y de la periferia fueron liberados después de más de tres horas de cautiverio en las instalaciones de la Secretaría de Finanzas y Tesorería General de Nuevo León. Aunque inicialmente planeaban permanecer durante la noche como forma de protesta contra el Gobierno estatal, su estancia se vio interrumpida.
Entre los alcaldes «secuestrados» se encontraban Daniel Carrillo de San Nicolás, David de la Peña de Santiago e Ignacio Castellanos de Agualeguas. Según los reportes, este incidente fue presuntamente ordenado por el gobernador Samuel García. Los alcaldes buscaban el reconocimiento de su triunfo en la entrega de un fondo de mil 730 millones de pesos destinado a municipios liderados por el PAN y el PRI.
Daniel Carrillo, alcalde de San Nicolás, expresó su intención de proceder legalmente y denunció que se les impidió realizar los trámites correspondientes respecto al fondo, acusando al gobierno de secuestrarlos durante casi tres horas.
Durante la tarde, se registró un conato de bronca a las afueras de la Tesorería cuando elementos de Fuerza Civil forcejearon con ciudadanos que intentaban apoyar a los alcaldes. Una mujer fue empujada y varios hombres recibieron golpes durante el altercado.
Policarpo Flores, presidente municipal del PAN de Monterrey, realizó un acto simbólico cerrando la puerta de la calle 5 de Mayo, declarando que si no se permitía la salida de los alcaldes, tampoco se dejaría salir a los empleados. Posteriormente, a las 18:20 horas, se permitió a los trabajadores de la Tesorería salir del edificio, siendo recibidos con abucheos y acusaciones por parte de la gente.