Greenpeace México metió un amparo en 2020, para que se regulara la atención de contingencias ambientales atmosféricas de forma adecuada en el Estado de México, sobre todo en el valle de Toluca y Santiago Tianguistenco, pues las partículas PM10 y PM2.5 en el aire y las concentraciones de ozono fueron insuficientes.
La organización ganó este amparo contra el gobierno del Estado y ahora deberán ajustar la normatividad. De no actualizar la norma se puede ordenar la destitución del titular de la dependencia y se les impondrá una multa equivalente a cien veces el valor diario de la UMA.
El coordinador de ‘Ciudades Sustentables en Greenpeace México’, Carlos Samayoa aseguró que el gobierno del estado no ha cumplido con la modificación de los parámetros establecidos.
“Las autoridades del Estado de México no han demostrado avance respecto al cumplimiento de la sentencia, que les obligó a hacer más estrictos los límites de contaminantes en el aire que están dañando la salud de miles de personas en el Valle de Toluca y Santiago Tianguistenco”.
Según Greenpeace se debe considerar la Norma de Salud Ambiental NOM 025-SSA1-12014.