Crisis alimentaria en escuelas mexicanas: Un llamado urgente a la acción

En México, el 98% de las escuelas están contribuyendo a la obesidad y diabetes entre menores, según alertaron organizaciones civiles. Este alarmante dato surge de un análisis que muestra que la mayoría de las instituciones educativas no cumplen con la normativa que prohíbe la venta de alimentos no saludables dentro de los planteles. A pesar de las leyes vigentes desde 2014, que obligan a ofrecer opciones saludables como frutas y agua potable, muchas escuelas continúan vendiendo productos altos en calorías y bajos en nutrientes.

Activistas y expertos destacaron que sólo una minoría de escuelas ofrece acceso regular a alimentos naturales y agua, mientras que la venta de refrescos y snacks procesados sigue siendo la norma. Esto no sólo pone en riesgo la salud de los niños, sino que también impacta negativamente en su desempeño académico y bienestar general.

La falta de cumplimiento ha llevado a llamados para que la Secretaría de Educación Pública emita y aplique nuevos lineamientos con sanciones efectivas para garantizar entornos alimentarios saludables. Además, se pide a los futuros líderes políticos garantizar y proteger estos entornos para el bienestar de la infancia mexicana.

El escenario actual presenta un desafío crítico para México: garantizar que las políticas públicas y la legislación existente sean efectivamente implementadas para combatir la crisis de salud pública que representa la mala nutrición en las escuelas.