El voto electrónico en México representa una evolución en el sistema democrático del país, pero su implementación enfrenta un gran desafío: generar confianza. Un reciente estudio del IBD destaca la importancia de este reto y subraya la necesidad de medidas que garanticen transparencia y seguridad.
El Instituto Nacional Electoral (INE) ha señalado algunas medidas que podrían facilitar la implementación del voto electrónico en nuestro país, como la creación de un plan de seguridad para proteger la información, la educación de la población en el uso de la tecnología y la elaboración de un software eficiente.
La adopción de tecnologías de voto electrónico busca modernizar y agilizar el proceso electoral, pero también requiere de una fuerte campaña educativa y de concientización. El estudio del IBD insta a las autoridades a priorizar la formación y la comunicación con la ciudadanía para asegurar una transición exitosa.