La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, propuso un sexto paquete de sanciones contra Rusia, el cual incluye un veto a las compras de petróleo ruso, que contempla que se aplique de manera progresiva y con excepciones para Hungría y Eslovaquia.
«Proponemos una prohibición del petróleo ruso. Será una prohibición total de importación de todo el petróleo ruso, por mar y por oleoducto, crudo y refinado», explicó von der Leyen.
La presidenta de la CE también informó que Bruselas propuso que el veto se implemente «de manera ordenada (…) para asegurar rutas de suministro alternativas y minimizar el impacto en los mercados globales».
«Seamos claros: no será fácil. Pero simplemente tenemos que trabajar en ello. Nos aseguraremos de eliminar el petróleo ruso de manera ordenada. Maximizar la presión sobre Rusia y minimizar el impacto en nuestras economías», escribió en Twitter, donde resumió su discurso ante el Parlamento Europeo.
Respecto a Hungría y Eslovaquia, fuentes europeas indicaron que, debido a que son naciones totalmente dependientes del petróleo ruso y no tienen salida al mar, podrían disponer de más tiempo que las demás naciones para aprobar la nueva propuesta de sanciones.