El día de ayer, la administración del presidente Donald Trump notificó al Congreso y a las Naciones Unidas, la retirada formal de Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El senador Robert Menéndez, principal demócrata del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, a través de su cuenta de Twitter dio a conocer la separación y afirmó que esta acción deja a «los estadounidenses enfermos y a América sola.»
«El Congreso recibió una notificación de que el presidente retiró oficialmente a EU del @WHO en medio de una pandemia. Llamar a la respuesta de Trump a COVID caótica e incoherente no le hace justicia. Esto no protegerá las vidas o los intereses estadounidenses. deja a los estadounidenses enfermos y a América sola», escribió.
Por su parte, Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, confirmó que Estados Unidos les había notificado de su salida, misma que tendría efectos a partir del próximo 6 de julio de 2021.
Según una resolución del Congreso de Estados Unidos en 1948, este país puede retirarse de la OMS pero informar con un año de anticipación y pagar sus tarifas pendientes. Dujarric hizo hincapié en que deben cumplirse esas condiciones.
Debemos recordar que Estados Unidos es el mayor contribuyente individual de la organización. Por ejemplo, en 2019, otorgó más de 400 millones de dólares para la misma, alrededor del 15% del presupuesto total del organismo.
Su salida podría afectar la estabilidad financiera de la OMS y el futuro de sus programas de atención médica.