El expresidente Donald Trump sorprendió al anunciar que, de volver a la presidencia, buscará renombrar el Golfo de México como «Golfo de América». Durante un mitin, argumentó que este cambio reforzaría la identidad estadounidense y la influencia del país en la región.
La propuesta ha generado polémica tanto en Estados Unidos como en México. Expertos en relaciones internacionales califican la idea como innecesaria y provocativa, mientras que ciudadanos mexicanos expresaron su rechazo en redes sociales.
Este planteamiento forma parte de una estrategia más amplia de Trump para captar apoyo en sectores nacionalistas con miras a las elecciones presidenciales de 2024. Sin embargo, analistas consideran que este tipo de declaraciones podrían generar tensiones con los países vecinos.
A pesar de la controversia, Trump continúa utilizando estos temas para mantener la atención mediática y fortalecer su base política, destacando su habilidad para polarizar el debate público.