¿Sabes por qué deberías dejar de usar la palabra ‘feminazi’?
La palabra viene de la mezcla de las palabras feminismo y nazismo y fue inventada por Rush Limbaugh, un conductor de televisión estadounidense del Partido Republicano, con el propósito de denigrar la lucha feminista.
El feminismo es un movimiento político y social que busca, desde sus inicios, conseguir la igualdad de mujeres y hombres en lo económico, social y cultural que, con el tiempo, ha ido evolucionando. Hoy día hay muchas tendencias dentro del mismo.
El nazismo, por su parte, es una doctrina política que enaltece el racismo (y la idea de una «raza pura») y el totalitarismo, su máximo exponente fue, como bien se sabe, Adolf Hitler, responsable de la muerte de millones de personas a quienes consideraba inferiores.
«Confunden: feminazi como si las feministas tuvieran una actitud autoritaria como el gobierno de Hitler en Alemania, que fue una dictadura que canceló todo tipo de libertades y que, además, a las mujeres alemanas y blancas las orientó a una vida doméstica y con muchos hijos que a la larga desplazaran a todos los que no cabían dentro del concepto de su doctrina: judíos, gitanos, a todos los demás. Un gobierno con una política de exterminio a quienes no eran como ellos», explica Gabriela Cano, quien también es doctora en Historia por la UNAM.
El año pasado, la cantante mexicoestadounidense Renee Goust, compuso y publicó «La Cumbia Feminazi», que con buen ritmo permite entender por qué el feminismo y el nazismo no son comparables.
Así que ya sabes, para la próxima antes de utilizar la palabra, recuerda que las feminazis no existen.