Las transferencias de los emigrantes rompen todas las previsiones y superan la suma de inversión extranjera directa y ayuda al desarrollo. Millones de familias de todo el mundo dependen del dinero que envían familiares desde el extranjero.
Las remesas cerrarán el 2021 consolidándose como la principal entrada de divisas del país, pues, de acuerdo con datos oficiales, concluyeron los primeros diez meses del año muy por encima de rubros claves como el turismo, la venta de petrolíferos, las exportaciones agroalimentarias y la inversión extranjera directa (IED).
Estas son un factor reconocido por empresarios de todas las regiones que componen el país y que favorece los niveles de consumo, de acuerdo con el reporte de economías regionales de julio a septiembre de 2021 publicado por Banco de México (Banxico).
Según datos de Banxico, de enero a octubre de 2021 las remesas ascendieron a 42 mil 168 millones de dólares, 25.6 por ciento más que en igual lapso del año pasado.
Las remesas también son superiores a los 24 mil 831 millones de dólares por IED, a los 24 mil 344 millones de dólares por ventas de petrolíferos al extranjero y a los 15 mil 14 millones de dólares que han gastado en México los turistas internacionales.
BBVA Research prevé que para el cierre de 2021, el ingreso de remesas rompa el récord de 52 mil 743 millones de dólares, aunque aclara que la dependencia de estos ingresos no es tan alta respecto a otros países de América Latina debido al tamaño de su economía.