Un segundo paciente en el mundo se curó del VIH tras haberse sometido a un trasplante de células madre, indicaron el martes sus médicos al no detectar ningún rastro de la infección 30 meses después de haber abandonado el tratamiento tradicional.
El llamado «paciente de Londres», un enfermo de cáncer originario de Venezuela, copó las portadas de los medios de comunicación el año pasado cuando investigadores de la Universidad de Cambridge anunciaron no haber detectado en su sangre ningún rastro del virus que causa el sida durante 18 meses.
El profesor Ravindra Gupta, autor principal del estudio publicado este martes en la revista The Lancet HIV, indicó que los nuevos resultados son «todavía más determinantes».
«Buscamos en un número considerable de lugares en donde el VIH le gusta esconderse y prácticamente todos eran negativos», salvo algunos restos «fósiles» del virus no activo, explicó Gupta a la AFP. «Es difícil imaginar que se eliminen todos los restos de un virus que infecta a miles de millones de células» (….) » Por ello, sugerimos que nuestros resultados representan una curación del VIH», escribieron los autores del estudio.
Pero los investigadores reconocen que por ahora, su método no es una solución para los millones de personas que viven con la enfermedad en el mundo y la controlan gracias a los antirretrovirales que deben tomarse toda la vida.
El procedimiento utilizado para ambos pacientes curados es muy pesado y peligroso y plantea cuestiones «éticas», según Gupta, estimando que sólo podría aplicarse a enfermos que sufren algún tipo de cáncer de sangre.
Casi 38 millones de personas viven con el VIH en el mundo, pero únicamente 62% sigue una triterapia. Casi 800.000 personas murieron en 2018 de afecciones vinculadas con este virus. La aparición de formas de VIH resistentes a los medicamentos también representa una preocupación creciente.