No cabe duda que el domino de la mente nos lleva a realizar cosas maravillosas, y ejemplo de esto es un monje shaolín que pudo caminar 125 metros sobre un lago, para batir el anterior récord de 118 metros impuesto por él mismo.
A los monjes shaolín se les instruye en kung fu, de donde obtienen su agilidad. La velocidad con que el monje realiza la caminata sobre un camino de 200 placas de madera, ayuda a que éste no se hunda. Las placas son colocadas en forma lineal con un centímetro de grosor y son incapaces de sostener el peso de una persona.
Cabe destacar que para que el monje cumpliera el reto, tuvieron que pasar más de cuatro horas en intentos, pues no encontraba la concentración necesaria, pero satisfactoriamente lo logró. El monje de origen chino, Shi Liliang pasará al recuerdo tras realizar esta hazaña.