El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) ha informado que la tasa de homicidios en México ha disminuido por tercer año consecutivo. Este descenso representa un avance significativo en los esfuerzos del gobierno y las autoridades para combatir la violencia y mejorar la seguridad en el país.
Según los datos del INEGI, la tasa de homicidios en 2023 fue de 27.5 por cada 100,000 habitantes, lo que refleja una disminución en comparación con los 29.3 registrados en 2022. Esta tendencia a la baja ha sido atribuida a una combinación de factores, incluyendo estrategias de seguridad más efectivas, mejor coordinación entre las fuerzas de seguridad y programas sociales dirigidos a prevenir el crimen.
El gobierno federal ha implementado una serie de políticas para reducir la violencia, como el fortalecimiento de la Guardia Nacional, el incremento de la presencia policial en zonas conflictivas y el fomento de programas de desarrollo social para jóvenes en situación de riesgo. Estas medidas buscan atacar las causas estructurales de la violencia, así como mejorar la capacidad de respuesta de las autoridades.
A pesar de los avances, las cifras siguen siendo altas en comparación con otros países, y el gobierno reconoce que aún queda mucho trabajo por hacer. Las autoridades se comprometen a continuar con los esfuerzos para reducir aún más la tasa de homicidios y mejorar la seguridad en todo el territorio nacional.
Los expertos en seguridad pública señalan que es crucial mantener y fortalecer las políticas actuales, además de promover una mayor participación comunitaria en las estrategias de prevención del delito. La colaboración entre los distintos niveles de gobierno y la sociedad civil es esencial para lograr una reducción sostenida de la violencia.
El informe del INEGI ha sido recibido con optimismo cauteloso por parte de la ciudadanía y organizaciones civiles, quienes esperan que esta tendencia a la baja continúe y que se traduzca en una mejora palpable en la calidad de vida de los mexicanos.