Hackean con Pegasus a docenas de periodistas y activistas en El Salvador
Al menos 35 periodistas y activistas en El Salvador fueron hackeados en sus teléfonos con el software espía Pegasus. Este software ha sido utilizado por los gobiernos para monitorear a los críticos y disidentes, según un informe.
Los investigadores dijeron que la mayoría de ellos trabajaban en el medio noticioso El Faro. Este medio se dedica a informar sobre supuestas conversaciones secretas entre el gobierno y las pandillas. Aunque no se pudo probar quién estaba detrás del hackeo, dijeron que la evidencia apuntaba a la participación del gobierno. El gobierno, por su lado, lo negó.
Pegasus, diseñado por la empresa israelí NSO Group, infecta dispositivos iPhone y Android. Permite a los operadores extraer mensajes, fotos y correos electrónicos, además de grabar llamadas y activas micrófonos y cámaras de forma secreta.
El Citizen Lab de la Universidad de Toronto, junto al grupo de derechos digitales Access Now realizaron dicha investigación. Juntos encontraron evidencia de incursiones en 37 dispositivos pertenecientes a 35 personas entre julio de 2020 y noviembre de 2021.
Los que presuntamente fueron hackeados trabajan en tres grupos de derechos humanos y seis publicaciones de noticias. Otro más es periodista independiente. El laboratorio de Seguridad de Amnistía Internacional confirmó de forma independiente los hallazgos.
El Faro, medio independiente, fue el principal objetivo
El objetivo principal fue El Faro, el principal medio de comunicación independiente del país, del cual, 22 personas fueron hackeadas, incluidos reporteros y editores. Eso equivale a más de la mitad de su personal. El informe aseguró tener la evidencia de que se habían robado datos de muchos de los dispositivos afectados.
Los presuntos hackeos coincidieron con informes publicados por el mismo medio sobre escándalos relacionados con la administración del presidente Nayib Bukele. Entre estas, incluidas acusaciones de que el gobierno negoció en secreto con líderes de pandillas en prisión para reducir los niveles de delincuencia. El gobierno negó las afirmaciones.
Por su parte, Óscar Martínez, aseguró que casi todas las personas de El Faro estuvieron bajo un «obsesivo espionaje con Pegasus». Además, recalcó que dicho software sólo se vende a los gobiernos.