La mañana del martes, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, informó la integración, como vocero especial para la defensa del Estado de Derecho, de Javier Lozano, extitular de la Secretaría del Trabajo.
Horas más tarde, a través de un comunicado, la Coparmex dio a conocer que el nombramiento de Lozano, se trataba de un error, ya que el único vocero de Coparmex es el presidente de la misma, Gustavo de Hoyos y resaltó que Javier Lozano colaborará como voluntario en diversas tareas de la agenda pública.
En dicho comunicado, se aclaró que Lozano «aportará sus conocimientos en conferencias, seminarios y foros, en el ámbito de la pluralidad, apertura y tolerancia propias de la membresía de la Coparmex».
Por su parte, Javier Lozano señaló que De Hoyos, «recibió mucha presión interna» lo que influyó para que este, cancelará su decisión.
«En cosa de horas pasamos de un tuit de la cuenta personal de Gustavo de Hoyos, donde me nombra vocero especial y horas más tarde me entero, porque llega por otro lado, un pantallazo, de una conversación interna, como marido ofendido, que dejaba sin efecto el nombramiento. Lo que mostró desafortunadamente Gustavo fue que una presión interna, que quiero pensar que solamente fue interna, lo llevó a recular y hacer un manejo desaseado. La verdad yo no puedo aceptar una encomienda así tan vaga. Ya se lo dije ayer, así no le entro», explicó.
Durante una entrevista con Ciro Gómez Leyva, Javier Lozano comentó que Gustavo de Hoyos le indicó no haber revisado bien los estatutos, y que el único vocero que Coparmex podía tener, era el presidente de la misma.
Lozano lamentó esta decisión ya que, aseguró, habría un buen resultado al ser Coparmex, la voz más fuerte del sector privado, misma que «hace contrapeso con las intenciones autoritarias del Gobierno de la República».