En el futbol hemos visto graves accidentes, desde golpes que terminan en impactantes fracturas hasta jugadores que se desploman en medio del campo sin razón aparente.
Aunque aparentemente no es un deporte peligroso, en ocasiones se pueden recibir golpes mortales como le sucedió a este jugador de Indonesia.
Akli Fairuz, jugador del Persiraja, en el futbol profesional de Indonesia, murió a causa de una dura patada en el abdomen, que recibió en pleno partido. El delantero intentó disputar una pelota dividida con el guardameta del PSAP Sigli y este último, al verse superado, lo golpeo brutalmente.
En seguida sus compañeros corrieron con el juez de línea quien no se dio cuenta de la gravedad del golpe. Varios minutos después se percataron que el jugador no se recuperaba y lo trasladaron de emergencia al hospital.
La patada en el abdomen le causó daños intestinales y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, pero los médicos nunca lograron estabilizarlo.
Seis días después del incidente, el club anunció su muerte y emitió sus condolencias a la familia y amigos del jugador.