Epic Games, conocido por desarrollar Fortnite, ha presentado una nueva demanda contra Google y Samsung, acusándolos de conspirar ilegalmente para bloquear la competencia en la distribución de aplicaciones en dispositivos Android. La demanda se centra en la función “Auto Blocker” de Samsung, que impide la instalación de aplicaciones de terceros a menos que provengan de tiendas “autorizadas” como Google Play y Samsung Galaxy Store.
Desde el 16 de agosto de 2024, Epic lanzó su propia tienda de aplicaciones para Android, disponible globalmente y en la Unión Europea. Sin embargo, Epic alega que Samsung activó la función Auto Blocker de forma predeterminada justo antes del lanzamiento de su tienda, dificultando la instalación de aplicaciones de la competencia. Según Epic, el proceso para descargar una tienda de aplicaciones de terceros en un dispositivo Samsung ahora requiere 21 pasos, lo que desanima a los usuarios.
Samsung defiende la función Auto Blocker como una medida de seguridad, pero Epic argumenta que no realiza evaluaciones de seguridad antes de bloquear instalaciones. Tim Sweeney, CEO de Epic Games, afirma que la función está diseñada para evitar la competencia, no para proteger contra malware.
Epic busca que se prohíba a Samsung y Google continuar con estas prácticas anticompetitivas y que se implementen medidas para restablecer la competencia. También solicita compensaciones económicas y garantías para evitar futuras restricciones a la instalación de tiendas de terceros.