El multimillonario Elon Musk presentó ayer al primer animal con uno de sus implantes neurales, los cuales cree que podrán ser usados próximamente por seres humanos.
Según Musk, el cerdo Gertrude lleva dos meses con el chip desarrollado por su compañía Neuralink. Esta pequeña computadora permitiría, de acuerdo con Musk, crear una interfaz entre el cerebro y la computadora y ayudar a personas con parálisis y otros problemas a comunicarse o a realizar ciertas actividades.
El aparato, que cuenta con la capacidad de estimular ciertas áreas del cerebro, incluso podría tratar problemas como el mal de Parkinson, o ayudar en el tratamiento de problemas motores. Sin embargo, algunos críticos señalan que, como ya es hábito, Musk es demasiado optimista. Un optimismo que, por otro lado, no le ha pagado mal, ya que es el cuarto hombre más rico del mundo.
Los críticos creen que esta tecnología aun deberá superar el escollo esencial de lograr interpretar las señales del complejo cerebro humano. Decodificar señales, como una intención de movimiento, no es algo sencillo y no hay garantía de que la tecnología lo logre en poco tiempo.
Musk también presentó a otro cerdo que tuvo el chip y que ahora no lo tiene y está sano. Como algunas personas han observado, estos son los dos primeros cerdos cyberpunk.
Más allá de las intenciones altruistas, el proyecto de Musk tiene el objetivo de aumentar la inteligencia del ser humano, estimulando mecánicamente el cerebro. Según Musk, con esto quiere combatir el peligro de la inteligencia artificial con un contrapeso humano. Aunque se puede poner en duda que de lo que habla es algo propiamente humano, quizá es más algo así como un híbrido.