Dirk Nowitzki, basquetbolista alemán de los Mavericks de Dallas de 39 años de edad, decidió cambiar de deporte por un día y jugó fútbol en su país natal con sus compatriotas, aunque no demostró tener grandes habilidades para este deporte y que lo suyo es el basquetbol.
Dirkm protagonizó uno de los clavados más ridículos en la historia del futbol, queriendo engañar al árbitro. La caída la realizó mucho antes de acercarse a su oponente. Lo único que le quedó fue sonreír cuando se levantó.
Ustedes juzguen su caída.