Un informe reciente de la OCDE pone de relieve la preocupante situación de la salud en México, donde la esperanza de vida es casi cinco años menor en comparación con el promedio de los países miembros. Con solo un 72% de mexicanos con acceso a los servicios de salud y un alto porcentaje de la población afectada por el sobrepeso y la obesidad, el país enfrenta desafíos significativos en su sistema sanitario.
Pese a tener tasas menores de tabaquismo y consumo de alcohol, así como una menor mortalidad por suicidios y una buena cobertura de vacunación de influenza en adultos mayores, México muestra carencias en otros indicadores clave de la salud. El gasto de bolsillo en salud, la cobertura de vacunación infantil y las tasas de mortalidad materna son algunos de los aspectos donde México se queda atrás respecto a otros miembros de la OCDE.
La inversión en salud como porcentaje del PIB es notablemente baja en México, al igual que el gasto per cápita en salud, lo que sugiere una necesidad urgente de reformas y mayor financiamiento. Además, la proporción de médicos y enfermeras por cada mil habitantes y la disponibilidad de camas médicas son inferiores al promedio de la OCDE, subrayando la necesidad de fortalecer la infraestructura y el personal médico.
La situación de la salud en México no solo refleja las prioridades nacionales, sino que también tiene implicaciones más amplias para el desarrollo y el bienestar económico general del país. Este informe podría ser un llamado a la acción para mejorar el acceso y la calidad de los servicios de salud para la población mexicana.