Día de las Madres a la Cuarentena, un 2020 gris.

Se dice que después de Navidad, el Día de las Madre es la segunda fecha más importante por celebrar para nosotros, los mexicanos, y es que para la madre todo ¿Apoco no?

Por años esta emblemática fecha ha sido de las más esperadas por el sector comercial ya que nos deja excelentes cifras cuando de economía hablamos, sin embargo, el panorama este año fue distinto; y no hablamos de los abrazos a distancia, las felicitaciones por teléfono y las video-reuniones familiares que es lo que dictaban las normas para este festejo, hablamos de ese panorama gris que ya vislumbraban los comerciantes, los restauranteros, los floricultores, todos aquellos que sumados reflejaron una pérdida- tan sólo para el Estado de México- según la Cámara Nacional de Comercio de 4 mil millones de pesos; no por nada muchos economistas lo llamaban el año negro para nuestro sector comercial.

Uno de los sectores más afectados por este festejo inusual, es aquel que se dedica a la producción y comercialización de flores, sector que calculó pérdidas de hasta 500 millones de pesos, que desafortunadamente se van a traducir en días desoladores para las familias que viven de esta actividad; la Asociación de Floricultores de Villa Guerrero-municipio número 1 en producción de flor en nuestro estado- declaro que junto con el 14 de febrero y el Día de Muertos el 10 de mayo son las fechas mas esperadas por las familias de Villa Guerrero ya que el 99% de ellas se dedican a la flor. 

En semanas pasadas toneladas de flores terminaron en la basura debido a la baja demanda que se tenía de esos productos, con las florerías cerradas debido al confinamiento, muchos de los floricultores se vieron en la necesidad de salir a la carretera para anunciar que cambiaban flores por despensas u otros a rematar hasta en $50.00 pesos MXN una caja de seis docenas de gerberas, cuando en una temporada regular las cajas pueden alcanzar un precio de hasta $600.00 en la Central de Abastos de la Ciudad de México, sin duda fueron días desoladores para estas familias. La única esperanza era él tan anhelado 10 de mayo.

Del Gobierno Federal ni sus luces para reactivar la economía en este sector, no han recibido ningún apoyo para mantenerse a flote y rescatar los sembradíos, la decisión fue muy clara, se instruyo cerrar el Mercado de Jamaica, uno de los mayores distribuidores de flor, con ello el golpe fue aún más duro para las familias Villaguerrerenses.

Por lo que, confiados del ánimo de solidaridad de nuestros vecinos, de los Izcallenses, y como buenos mexicanos deseosos de apoyar en los momentos difíciles, junto con un grupo de amigos y con todas las medidas de seguridad necesarias emprendimos una campaña en redes sociales que tuvo un impacto mucho más grande del que esperabamos, anunciamos las flores de mayor existencia en los campos como la gerberba y la rosa.

Emprendimos la búsqueda de esas familias de Villa Guerrero que tenían lista su producción para ser entregada, decidimos apoyar a todas esas familias para que su trabajo y sus ingresos no terminaran marchitos en esos campos coloridos que esperaban ansiosos adornar los hogares de nuestras madres; más de 300 entregas se realizaron esos días entre (Tlalnepantla, Naucalpan, Atizapán, Zumpango, Tultitlán, Coacalco y por supuesto Cuautitlán Izcalli), con ello visibilizaron una gran sonrisa y la tranquilidad de los floricultores favorecidos era evidente y con la esperanza bien solida de que todo mejore muy pronto; al igual que todos. 

Al tiempo comprenderemos que estas acciones, les permitieron salir momentáneamente del problema, sino se toman medidas rigurosas de acción para reactivar económicamente esa zona, terminarán en una tragedia aún mayor. Se necesita urgentemente el interés del Gobierno Federal, son miles de familias que se están quedando sin sustento.

Este es tan solo uno de los sectores que se ha visto brutalmente azotado, pero son muchos más los que pasan por estos momentos de angustia.

Para concluir les quiero compartir este video de agradecimiento a todos los que se sumaron de corazón. ¡Muchísimas Gracias!.