Las bancadas de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN) en la Cámara de Diputados acordaron con el gobierno federal adicionar dos artículos transitorios a la Ley Federal de Presupuesto para convertir en deuda pública unos 700 mil millones de pesos de los pasivos laborales de Pemex y de la CFE.
Los pasivos laborales es una parte del contrato laboral de los trabajadores de la paraestatal, que la obliga a pagar las siguientes obligaciones:
- Liquidación y prima a todo trabajador con más de 15 años de antigüedad o más, esto en caso de renuncia voluntaria.
- Apoyos para vales de gas, gasolina, canasta básica y aguinaldo de 60 días; además de pago de jubilación por vejez o incapacidad.
- Y si se piensa que una vez muerto el trabajador se puede olvidar el pago de estas obligaciones… pues no, nada de eso: existe también la pensión postmortem, que va junto con un pago de canasta básica, y vales de gasolina.
La disposición de que los pasivos laborales de Pemex y CFE sean deuda pública forma parte del paquete de legislación secundaria en materia energética discutido en las comisiones unidas de Presupuesto y de Energía.
El proyecto de dictamen de Ley Federal de Presupuesto establece que: “el gobierno federal podrá asumir una proporción de la obligación de pago de las pensiones y jubilaciones en curso de pago, así como las que correspondan a los trabajadores en activo de Pemex, (…) siempre que, dentro del año siguiente a la entrada en vigor del presente decreto, la empresa alcance un acuerdo para modificar el contrato colectivo”.
Igualmente obliga a la petrolera a modificar su Reglamento de Trabajo del Personal de Confianza de Petróleos Mexicanos y Organismos Subsidiarios, y subraya que dichas modificaciones deberán conllevar en el mediano plazo a una reducción del pasivo laboral.
La deuda pública de Pemex y CFE asciende a los 1.9 billones de pesos, de los cuales 700 mil millones serían obtenidos de los impuestos de los mexicanos o sacados de las ganancias de la petrolera.