En su reciente conferencia matutina, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, criticó duramente a la oposición por lo que él considera un uso hipócrita de los programas sociales en sus campañas. Según AMLO, estos partidos, que antes se oponían a dichos programas, ahora los prometen mantener para ganar votos, evidenciando una falta de sinceridad y compromiso real con el bienestar del pueblo.
AMLO destacó que los programas sociales no solo están garantizados por la Constitución, sino que también son un derecho del pueblo, acusando a la oposición de manipular estas políticas para beneficio electoral. Argumenta que, a pesar de haber sido criticado de populista y comunista, él ha mantenido una línea de apoyo constante hacia las necesidades sociales, en contraste con la oposición que cambia su postura según la conveniencia política.
El presidente reafirmó que cualquier cambio a estos programas, que han sido clave durante su gobierno, solo se haría en detrimento del pueblo, lo cual, según él, es indicativo de la «doble moral» de sus adversarios políticos. AMLO denunció esta actitud como un claro ejemplo de la desconexión entre la clase política y las necesidades reales de los ciudadanos.
Con palabras firmes, López Obrador concluyó que el verdadero amor al pueblo se demuestra con acciones y no con promesas vacías que buscan manipular la opinión pública para obtener votos. Insistió en que la integridad y la consistencia son fundamentales en la política, especialmente cuando se trata del bienestar de la nación.
Este enfrentamiento verbal subraya la tensión existente en el panorama político mexicano, especialmente en un contexto electoral donde la verdad y la transparencia son cruciales para ganar la confianza del electorado.