La 60 Legislatura Estatal aprobó que se declaren delitos graves acreedores de prisión preventiva, a la violación de los sistemas de seguridad o antirrobo de vehículos, la intervención en sistemas geolocalización, la ruptura de sus cristales, el robo de autopartes y elementos dentro del vehículo, así como el robo de vehículos estén estacionados con o sin ocupantes.
El diputado Gerardo Ulloa Pérez de Morena, dio lectura al dictamen de la iniciativa de reforma al artículo 290 del Código Penal del estado de México, conforme al cual el robo de vehículos, se ha incrementado, además de las distintas modalidades que existen, razón suficiente, para elevarlas a delito grave y así evitar que los perpetradores reincidan en dicho delito.
«No obstante las acciones emprendidas por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México no disminuyen la comisión del delito de robo de vehículo en nuestra entidad; por el contrario, se ha visto incrementado, de manera preocupante, haciendo necesario revisar la legislación para su actualización y, en su caso, adopción de medidas como el incremento de la penalidad, en favor de la seguridad pública», se detalla en el documento.
Actualmente el Código Penal de la entidad ya considera como agravantes en el delito de robo, esto, al causar la muerte del o los ocupantes del vehículo, conforme el uso de la violencia física, moral y sobre los bienes, al haber dos o más sujetos involucrados en el delito,al existir presencia de menores, mujeres, adolescentes o adultos mayores, el que se lleve a cabo en unidades de transporte público, entre otras razones.
El diputado Gerardo Ulloa reconoció a las comisiones dictaminadoras por la aprobación de la iniciativa y su apoyo al haberla enriquecido.
El dictamen establece que cuando el robo se cometa estando el vehículo estacionado con o sin ocupante u ocupantes a bordo, la penalidad aumentará en una mitad. Además de las penas señaladas, cuando en la ejecución de este delito existan dos o más sujetos pasivos se impondrán a los sujetos activos, por cada pasivo de uno a dos años de prisión.
Esta iniciativa permitirá que se impongan de seis meses a seis años de prisión y de uno a tres veces el valor de lo robado, sin que exceda de quinientos días de multa, esto, cuando el robo se cometa al interior de un vehículo particular o recaiga sobre una o más de las partes que lo conforman, autopartes o sobre objetos que se encuentran en su interior.