El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha reconocido que los 32 migrantes secuestrados en la carretera Reynosa-Matamoros, en Tamaulipas, fueron liberados por sus captores y no rescatados en un operativo. Este anuncio aclara las circunstancias en torno a la liberación de los migrantes, que inicialmente había generado confusión.
Durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, López Obrador reveló que el secuestro fue un acto de extorsión dirigido a los familiares de los migrantes que se encuentran en Estados Unidos. El presidente expresó su alivio por la decisión de los responsables de liberar a los migrantes.
Aunque la investigación continúa y aún no se han identificado a los responsables, el presidente informó que se están tomando declaraciones de las víctimas para esclarecer los hechos. Además, se ha proporcionado asistencia médica a los afectados.
En el operativo de rescate participaron autoridades locales, la Guardia Nacional y la fiscalía estatal. López Obrador respaldó el actuar de las autoridades y destacó que intervinieron prontamente en la situación.
El incidente comenzó cuando un autobús con 36 migrantes de distintas nacionalidades fue interceptado por hombres armados. Posteriormente, cinco migrantes venezolanos fueron liberados por la Guardia Nacional después de que sus captores huyeran. Los migrantes liberados confirmaron que eran parte del grupo secuestrado inicialmente.