Las mujeres y la copa… menstrual

Caer en estereotipos es bien fácil, por ello, en esta primer entrega de la sección de mujeres, hablaremos de la menstruación y la mejor compra que hice el año pasado: la copa.

Algunas amigas cercanas ya me la habían recomendado meses antes, hasta que por fin me decidí a tenerla, les puedo asegurar que nunca se arrepentirán de ella, hay de colores y tamaños distintos, reduces riesgos de infecciones y hasta del famoso (o no tanto) shock por el uso del tampón y el mejor beneficio colateral: ayudamos al planeta, ¿cómo? No generando más de 200 toallas sanitarias o tampones al año.

La onda va así: la copa se debe vaciar periódicamente, casi al mismo tiempo que debes cambiar una compresa o tampón, sin embargo no tienes esa horrible sensación de traer un plástico pegado a la pantaleta o rogar por no sacar un tampón seco (ouch); la retiras la enjuagas con jabón neutro y agua y estará lista para volverla a introducir; obviamente es más cómodo si se hace en un baño privado pero si no tienes ese chance puedes solo limpiarla con papel higiénico.
No puedo mentirles, no es fácil agarrarle la onda a la copa si no conoces tu cuerpo o si tienes algo con la sangre, sin embargo para ese caso te recomiendo usar una copa de color. El mantenimiento es mucho más barato, porque no tienes que comprar una en cada ciclo, basta con que la hiervas en un pocillo (exclusivo para ella) al terminar cada periodo.
Ya que la copa no deja pelusitas en nuestras entrañas o no tenemos algo entre las piernas que no deja respirar nuestra piel, tenemos menos riesgos de infecciones y a su vez menos cólicos; es hiper (de verdad, hiper) cómoda, manejable, libre, no contamina al exterior ni al interior y sobretodo, con los cuidados adecuados, puede durar hasta 10 años.

Amigas, lean, investiguen, pregunten, pero sobretodo intenten algo que mejorará su salud y su economía; hay mucha información al respecto, si no es suficiente consulten foros y obviamente a su ginecólogo.