Las toallas y tampones convencionales generalmente están hechas de una combinación de plástico, fibras artificiales y otros productos químicos. Sobra decir que las cantidades que se utilizan por persona y por ciclo son excesivamente altas, para que además tarden miles de años en degradarse.
Ahora es posible dejar de utilizar tantos plásticos que solo contaminan durante el ciclo menstrual con productos reutilizables y 100% seguros.
Copa menstrual
No es tan aterradora como parece, hay de diferentes tallas para ajustarse perfecto a cada mujer y esta puede mantenerse segura hasta por 12 horas. Para colocarla, debe doblarse por la mitad e introducirla suavemente en la vagina, soltarla y automáticamente comenzará a recolectar la sangre.
Toallas femeninas de tela
Con la misma forma de las toallas tradicionales, tienen poder de absorción, además de ser muy suaves, cómodas (mucho más para las que están acostumbradas a ellas) y sin irritaciones. Sin embargo, se tiene que tener en cuanta que la limpieza de estas implica remojarlas en agua fría, lavarlas y luego secarlas, cada vez que vayan a usarse. Es más trabajo, tiempo y lamentablemente, agua.
Esponjas marinas
Probablemente, las menos conocidas hasta el momento. Estas esponjas son criaturas similares a plantas que crecen en colonias en el fondo del océano. Estos «tampones» no solo son biodegradables y se cosechan de manera sostenible, también son cómodos de usar. Deben humedecer suavemente la esponja, luego aplastarla y empujarla suavemente dentro de la vagina. Para volverlas a utilizar, se enjuagan con agua tibia y se dejan secar.
Panties
Están fabricados con una tecnología que está en cuatro capas de tela. Son fibras naturales, absorbentes y que combaten las bacterias. Se puede elegir entre distintos tipos de modelos y de cantidad de flujo como más convenga. Se lavan con normalidad, como cualquier otra prenda, en la lavadora.
